No tengo una buena relación con mi madre y la verdad creo que no me interesa tener una cercanía mayor con ella, ya que me ha lastimado mucho. Me molesta su forma de ser, tan autoritaria, se impone y quiere mandar a todos. Nunca toma en cuenta a nadie.

A pesar de que reconozco que mi mama es una gran mujer que trabaja y sacó adelante a mi familia, siento que solo se fija en ella y todo lo que organiza piensa como ella puede sacar provecho de todas las circunstancias y cuando lo hace nunca piensa en cómo otros se pueden sentir.

Becky responde

Sin duda la relación madre e hija es una relación muy compleja. Por un lado es necesaria y básica sobre todo en la primera etapa de la vida donde hay un apego natural y necesario para poder sobrevivir y donde posteriormente se forman los valores y el carácter y ciertos conflictos personales.

Dicho esto, es importante reconocer que es una relación primaria, es decir una relación básica que se debe en lo posible de cuidar y tratar de mejorar con el fin de que se pueda tener una buena vida.

El cuidar y restaurar o reconstruir una relación sana con la madre permite eventualmente mejorar la calidad de las relaciones con los demás.

Lo que agravia tu relación con tu madre es que tu mamá es una mujer impositiva y autoritaria entonces en lugar de sentir su apoyo y cariño genuino, sientes que te quiere imponer sus reglas y expectativas de manera firme y exigente. Al ser tú una persona más retraída y sensible te puedes sentir incomprendida, traspasada y casi invisible ante sus ojos.

 Estas diferencias en el estilo generan choques y luchas de poder acompañadas por grandes resentimientos y frustración que de simple vista te hacen sentir odio ante ciertas acciones de tu madre.

Quizá hablar de odio será una palabra muy fuerte y con un calificativo con desprecio y mucho dolor, factores que pueden obstaculizar la comunicación y el deseo de querer mejorar tu relación con ella.

Hay una gran posibilidad de que por que tu madre es una mujer impositiva y autoritaria puede tener dificultades para comprender y validar tus emociones y necesidades, además, puede tener expectativas muy altas sobre tu rendimiento, logros y comportamiento ya que lo mismo que te exije a ti seguramente se lo debe de exigir a ella misma.

Al mismo tiempo, la falta de una comunicación efectiva puede agravar el conflicto y los sentimientos que este conflicto se desencadena. Recuerda que las madres impositivas y autoritarias pueden tener dificultades para expresar su afecto y brindar apoyo emocional de manera adecuada.

Sentimientos que crea el tener una madre impositiva y autoritaria.

 

1. Sensación de presión constante que desencadena el sentimiento de abrumación e impotencia ya que crea dificultades para cumplir con esas expectativas.

2. Dificultad e impotencia para comunicar sus necesidades y preocupaciones de manera clara.

3. Creación de  malentendidos y resentimientos en ambas partes y muchas veces están tan arraigados que son muy complicados para poderlos trabajar.

4. Desesperación por sentirse validada y necesidad de independencia.

5. Deseos y necesidad por sentir libertad para explorar el mundo a su propio ritmo, sin sentirse criticada y juzgada, creando un conflicto por el deseo de sentirse libres por parte de la hija  y la necesidad de control de la madre.

Recomendaciones:

1. Recuerda que tu madre te quiere y realmente quiere lo mejor para ti.

2. Agradece que mucho de su sacrificio fue para que tu tuvieras una mejor calidad de vida aunque no sepa cómo expresarlo.

3. Reconoce que detrás de una mujer fuerte y autoritaria, hay una mujer que ha luchado y que seguramente ha sufrido para llegar a tener y lograr donde están. Dale crédito.

4. Sentimientos negativos, cargados de odia crean malestar, mismos sentimientos que se reflejan y se proyectan en otras relaciones. Por lo que es importante que aclares, limpies y en lo posible sanes tu relación.