Sufro maltrato psicológico y siempre se lo cuento a todo el mundo incluso a gente desconocida y luego me siento mal porque me pesa la culpa de haber dañado mi reputación pero no consigo cambiar, por mas que lo intenté siempre cometo el mismo error.

Respuesta

Quejarte, acusar a tu pareja frente a otros o hablar constantemente del maltrato que sufres no resolverá tu problema; de hecho, solo lo perpetúa. Cada vez que repites tu historia, intensificas el dolor y reduces tus posibilidades de salir de ese círculo vicioso.

Entiendo el dolor y la frustración que sientes al estar atrapado en una relación con alguien que te maltrata. Sin embargo, el verdadero problema no es solo tu pareja; el problema también radica en que permites que te traten de esa manera.

Es posible que, al contarle a otros lo que te sucede, encuentres un cierto alivio momentáneo, una especie de satisfacción al recibir empatía y comprensión. Pero este consuelo temporal es engañoso, ya que, lejos de ayudarte, te mantiene en un estado de victimización. La lástima que recibes te hace sentir más pequeño, indefenso y dependiente, reforzando la creencia de que no tienes el poder para defenderte y cambiar tu situación.

Recuerda: somos lo que pensamos, y los demás nos tratan como nosotros lo permitimos.

Si pasas todo el día quejándote y describiendo lo mal que te va, te estás convenciendo a ti mismo de que eres una víctima indefensa a la que no se le puede ayudar. Sin embargo, si decides cambiar tus pensamientos, dejar de quejarte y establecer límites claros, es posible que tu relación cambie y que encuentres la fuerza para defenderte y expresar tus necesidades.

Aquí tienes algunos consejos para comenzar a cambiar esta situación:

1. Establece límites claros: Aprende a decir “basta” cuando sientas que estás siendo maltratado. Frases como “No me humilles” o “No me gusta ese tono” pueden ayudar a frenar el abuso y abrir un espacio para una comunicación más respetuosa.

2. Cambia tu enfoque: Deja de concentrarte en lo negativo y enfócate en cómo puedes mejorar tu situación. Reconoce que tienes el poder de cambiar la narrativa y tomar el control de tu vida.

3. Busca apoyo constructivo: En lugar de buscar lástima, rodéate de personas que te ofrezcan apoyo positivo y te impulsen a tomar medidas para mejorar tu situación.

4. Trabaja en tu autoestima: Fortalece tu confianza en ti mismo. Cuanto más seguro te sientas de tu valor, menos permitirás que otros te traten mal.

5. Considera ayuda profesional: Hablar con un terapeuta o consejero puede proporcionarte herramientas efectivas para enfrentar y cambiar tu situación, así como para reconstruir tu vida en un entorno más saludable.

Recuerda, la persona que tiene el poder de cambiar tu situación eres tú. Empieza hoy tomando decisiones que te fortalezcan y te permitan vivir la vida que mereces.