Por estar siempre enfocada en mis necesidades, mis fantasías, mis miedos y mis deseos no cumplidos termine alejando para siempre a un buen hombre con el cual tenía ya una relación estable y buena. Siempre veía las cosas desde mi perspectiva, cuando me sentía desconectada yo insistía que él tenía que trabajar por hacerme sentir querida y segura. A pesar de que él lo hizo yo nunca sentí que era suficiente. Hoy entiendo que fui caprichosa, insistente y poco tolerante. Reconozco que cuando contaba la historia y justificaba mis acciones nunca fui justa ya que solo veía mi lado y en ciertos momentos bastante egoísta. Claro que también fui una mujer divertida atrevida y detallista, no todo ni siempre estábamos mal, pero cuando estábamos mal, yo me ponía muy mal ahora estoy muy triste porque estoy entendiendo todo lo que hice para lastimar la relación y aunque ya hable con él y le pedí disculpas él ya no tiene interés de volver conmigo e intentar reconstruir nuestra relación. Estoy tan triste… no me aguanto y me siento horrible me hubiera gustado que él me hubiera entendido y ayudado.

Respuesta

Siento mucho que estés pasando por este momento tan difícil y entiendo la tristeza que sientes tras perder una relación tan significativa. A la vez, me alegra saber que has decidido iniciar un proceso de autoconocimiento y responsabilidad emocional. Este camino no siempre es fácil y puede ser doloroso, pero los beneficios de entenderte mejor a ti misma y reconocer tus patrones son inmensos.

Aprecio mucho tu sinceridad. Reconocer tus actitudes y errores requiere valentía, y este tipo de honestidad puede ser una herramienta poderosa para tu crecimiento. Es posible que, en este momento, retomar la relación no sea viable, especialmente si tu pareja ha llegado a su límite emocional debido a tus demandas y comportamiento. Aprovecha este momento para trabajar en ti misma y profundizar en preguntas como: ¿qué necesidades no estás atendiendo en ti misma que llevaron a esas exigencias hacia él? ¿Qué te hace sentir insatisfecha? Y, sobre todo, ¿cómo puedes transformar esta experiencia en una oportunidad de crecimiento y aprendizaje?

Estás en un punto crucial de autodescubrimiento. Si aprovechas esta etapa, podrás liberarte de cargas emocionales que has llevado durante mucho tiempo y aprender a relacionarte contigo misma de forma más compasiva y auténtica. A su vez, esto te permitirá en un futuro construir relaciones más sanas y positivas, tanto contigo misma como con una pareja.

No te apresures; date el tiempo necesario para sanar y evolucionar. Recuerda que aceptar tus errores y enfrentarlos es un acto de gran valentía, y esa será la mayor enseñanza que puedes llevarte de esta experiencia.

Aquí tienes tres consejos prácticos para acompañar tu proceso de crecimiento personal:

1. Práctica diaria de autocompasión y aceptación: Reconoce tus errores sin juzgarte duramente. Escribe en un diario los momentos en los que sientes que has actuado impulsivamente o con exigencia y reflexiona sobre qué lo motivó. Esto te permitirá ver tus patrones y te ayudará a elegir mejor tus reacciones en el futuro.

2. Enfoque en la comunicación emocional: A veces, las expectativas y las fantasías se vuelven tan intensas que nublan nuestra capacidad de ver lo que realmente necesitamos. Dedica tiempo a trabajar en comunicar tus emociones de forma sincera y sin esperar que otros cumplan con ellas para sentirte bien. Esto podría implicar practicar la comunicación asertiva y aprender a identificar las necesidades que hay detrás de tus reacciones.

3. Busca apoyo en terapia o en un grupo de desarrollo personal: Contar con un profesional o con un grupo de personas que estén en un camino similar puede ayudarte a ver tus avances y a entender mejor tus emociones. Además, te brindará herramientas para manejar las dificultades y construir relaciones más saludables en el futuro.