Cada ves que tengo que tomar una decisión me cuesta trabajo platicar con mi pareja ya que se enoja, grita y al final no me dice que quiere hacer y no tomamos ninguna decisión.
Las opiniones de las otras personas pueden ayudar o perjudicar dependiendo del interés y la honestidad de la persona con la cual se esté considerando tomar en cuenta.
Hay que pensar que cuando uno tiene que tomar decisiones importantes y personales las cuales no involucran a nadie más, es conveniente ser asertivo. Se debe de tener primero una idea clara de lo que se quiere y lo que no se desea. Es útil entender y analizar las consecuencias y las oportunidades que pueden suceder al hacer o dejar de hacer lo que esta en cuestión. Una vez que se ha tomado la decisión se debe de estar firme y llevar a cabo lo que se ha decidió, sin tomar en cuenta las opiniones que afecten la toma de decisiones.
Pero si las decisiones involucran a tu pareja desde luego que hay que aprender a dialogar y a entender el punto de vista del otro. Muchas veces es difícil iniciar la plática, ya que hay miedo o resentimientos, pero cuando uno aprende a escuchar atentamente sin tratar de imponerse o juzgar los pensamientos de los demás, entonces se puede buscar lo mejor para los dos. Las decisiones se toman juntos, sin gritos, ni peleas, se validan y se cuidan los intereses de todos.
Hay personas que le cuesta mucho trabajo tomar decisiones, hay otros que son más seguros y les gusta ser decididos. En una relación es importante ser sincero, ayudarse y apoyarse para que juntos puedan hacer lo mejor por la relación.
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