Desde que era un niño nunca tuve la claridad de quién era mi padre. El que era según mi papá, nunca habló conmigo y siempre estaba en su habitación tomado. Mi tío sin embargo siempre estuvo al pendiente de mi y hasta el día de hoy ve por mi. Mi padre falleció y nunca tuve con quien hablar pero siempre me ha quedado la duda.

Respuesta

Antes que nada, es importante reconocer que el padre biológico es aquel que engendra al hijo, pero no necesariamente es quien lo cría, lo nutre y lo protege. Un hombre puede engendrar un hijo, pero si no lo cuida y no lo hace suyo, su valor como padre termina el día que el hijo nace. Cada momento y cada atención que uno tiene para con sus padres o hijos es lo que verdaderamente conforma el título de paternidad.

Vivir con la duda y la incertidumbre de no saber quién es tu padre debe ser un tema muy difícil, ya que implica vivir con mil preguntas que nadie ha tenido el valor de responder. ¿Qué pasó entre tu madre y ese “tío”? ¿Por qué tu padre salió del panorama? ¿Fue el alcoholismo un factor que empeora las cosas? ¿Cómo era la relación con tu madre? ¿Es igual con tus hermanos, si los tienes? Podríamos seguir con esta cascada de preguntas, pero incluso así, no creo que encontraríamos una respuesta que realmente te satisfaga, ya que tu incertidumbre está justificada y debe generarse confusión y dolor.

Sin embargo, creo que estas preguntas, aunque comprensibles, no son constructivas ni necesariamente adecuadas. Quizás la pregunta más sensata sería: ¿Realmente quieres saber si el señor con el que nunca te comunicaste y que nunca se interesó en ti fue tu padre biológico? ¿Por qué es importante para ti aclarar este tema?

En realidad, tú tienes un padre, un buen hombre que te ha cuidado, que ha estado a tu lado y que te ha apoyado. Esta persona a la que llamas “tío” es mucho más que un padre biológico porque nunca te ha abandonado y ha sido un ejemplo mucho mejor que el hombre que llegaba borracho a tu casa y se encerraba en su habitación.

Tal vez, más que preguntarte quién es tu padre biológico, deberías centrarte en agradecer a este gran hombre por haber estado junto a ti y por ser alguien en quien siempre has podido confiar. Eres una persona afortunada porque, a pesar de cualquier confusión entre los adultos de tu vida, has tenido la suerte de contar con un buen hombre cerca de ti.

Entiendo que sería maravilloso tener la certeza y poder agradecerle abiertamente a tu tío/padre por su tiempo, cariño y educación, pero ¿qué te impide hacerlo ahora? Finalmente, con título o sin él, él es tu padre y está presente en tu vida.

Cinco formas de agradecer:

1. Exprésale tu gratitud directamente: Dile con palabras sinceras cuánto aprecias todo lo que ha hecho por ti. A veces, un simple “Gracias por todo lo que has hecho por mí” puede tener un gran impacto.

2. Haz un gesto especial: Planifica algo que le guste, como una cena en su lugar favorito, un paseo juntos o una actividad que disfrute. Mostrarle que piensas en él es una forma poderosa de agradecer.

3. Escríbele una carta: A veces, poner tus pensamientos por escrito puede ser una manera profunda de expresar tu gratitud. Una carta le permitirá releer tus palabras y sentir ese agradecimiento cada vez que lo necesite.

4. Pasa tiempo de calidad con él: Dedica tiempo a estar con él, compartiendo actividades cotidianas o simplemente conversando. El tiempo es uno de los regalos más valiosos que puedes ofrecer.

5. Apóyalo cuando lo necesite: Así como él ha estado para ti, asegúrate de estar presente para él en sus momentos difíciles o cuando necesite ayuda. La reciprocidad fortalece el vínculo y muestra cuánto valoras su presencia en tu vida.