Todo lo que se lastima, se puede sanar, si se tiene la intención y conciencia del daño causado.

No creo conocer alguna persona que en su sano estado mental diga “yo soy mala y busco lastimar a todos los que me rodean”, de hecho, mucha gente que está en la cárcel insisten que son inocentes y que tenían una buena razón para actuar.

Es difícil y quizá injusto categorizar a una persona como buena o mala. Cada persona tiene su historia y es imposible juzgar sin conocer lo que esta persona ha vivido, ha aprendido y entiende que es la manera correcta de actuar.

A pesar de que sería interesante entender los motivos y la cuestión moral que motivan a las personas a actuar de determinada manera, este ensayo tiene el propósito de ver cómo se puede sanar cuando se actúa equivocadamente, como dejar de sentirse mal con uno mismo y como se puede recuperar el sentimiento de bondad y paz emocional.

Ser y actuar como una buena persona, es sin duda un trabajo que requiere disciplina, esfuerzo, conciencia y sobre todo, es una acción que se tiene que nutrir a diario. Cada quien tiene el poder y la oportunidad de elegir en cada momento como quiere actuar. Siempre se puede cambiar de parecer de un momento a otro.

El alma desea vivir bien, busca su paz, necesita armonía y balance para poder desarrollar sus potencialidades y vivir en plenitud. Es terrible cargar la culpabilidad y el malestar por sentirse malvado o haber actuado erróneamente.

A pesar de que uno puede tener buenas intenciones y hacer “BUENAS” acciones, hay ocasiones que las cosas no se dan como uno espera y sin querer o por una intensión mal encaminada, uno puede lastimar, echar a perder, herir y causar mucho más daño de lo que esperaba.

Hay ocasiones que uno cree que se está actuando con buenas intenciones y en realidad está causando mucho dolor y actuando equivocadamente. Por ejemplo Esteban insiste que él es el hijo bueno de su familia. Toda acción que hace, cada palabra que dice cada pensamiento los tiene premeditados, a toda costa insiste en demostrar su bondad… pero NO le importa si sus acciones confrontan, dañan las relaciones entre sus hermanos o si ofende cuando habla. Su necesidad por ser el mejor lo ha segado del dolor y los problemas que ha causado. ¿El daño y el dolor que causa justifican sus principios por ser el mejor y el más buen hijo?

El problema de estar convencido de que uno es bueno y tiene las mejores intenciones radica en que su convicción le impide ver la realidad y el daño colateral que causa es imposible de sanar si no lo puede reconocer.

Uno tiene que actuar en armonía con el universo y debe de buscar el bien para todos y no solo para sus necesidades, la bondad no se justifica, se ve y se siente claramente y sin explicaciones.

La receta

Para ser una buena persona

Ingredientes

• Honestidad – reconocer y diferenciar las intenciones de los intereses personales
• Conciencia – responsabilidad personal y de las consecuencias que causan las acciones
• Humildad– perspectiva de cada quien en el entorno del universo
• Consideración – sensibilidad hacia los demás y respeto a la armonía global
• Fortaleza – para reconocer cuando uno a lastimado y tener el valor para repararlo

Afirmación positiva

Soy una persona buena. Busco armonía y paz en mis relaciones con las personas y con el mundo. Tengo la sensibilidad para reconocer que hay veces me equivoco y creo que hago las cosas con buenas intenciones pero puedo lastimar sin darme cuenta. Logro ver el dolor que le causo a los demás y asumo mi responsabilidad para reparar mis acciones.

Como se puede ser una persona buena:

1. Ser bueno es una acción que se aprende y se perfecciona diariamente. El ser una persona buena es el resultado de nutrir la conciencia con pensamientos positivos y con acciones responsables y armoniosas.
2. Todas oportunidades que surge es una posibilidad que ofrece el mundo para ser mejor persona. La vida está llena de momentos que si se aprovechan se pueden convertir en las mejores ocasiones para fortalecer la personalidad, y transformar un simple momento en un acto extraordinario, creando paz y fortaleciendo las relaciones del alrededor.
3. La bondad proviene del corazón. Se hace el bien porque es lo correcto para todos, nunca para satisfacer necesidades personales y egoístas. No se busca impresionar, ni se trata de imponerse, solo se busca hacer el bien y sentirse en paz y armonía con uno mismo y con el mundo.

Uno es tan sano y bueno como la calidad que tenga con sus relaciones personales.

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