A partir de hoy, me comprometo a ser una persona sensible, respetando las ideas de los demás y ofreciendo mis opiniones cuando sean requeridas. Cedo con gusto y generosidad, alegrándome cuando las personas que me rodean pueden disfrutar de sus gustos y deseos, incluso si me parecen extraños o ridículos, siempre y cuando no afecten ni causen daño a nadie. Agradezco la diversidad y me alegra vivir en un mundo que respeta los puntos de vista de otros sin crear conflictos.
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