Con mi mama no hay diálogo. Tengo que hacer todo lo que ella quiere y justo como ella me lo pide y si no lo hago entonces me hace sentir que no hago las cosas bien y además que no se hacer nada. Por mucho tiempo pensé que si la satisface ella me iba a querer más e iba a tener mejor relación con ella pero ya me di cuenta que no hay forma con ella. Todo lo que hago por mi y para mi le molesta, me critica y me hace sentir inútil.
Becky responde
La situación que estás experimentando es indudablemente desafiante. Comprendo que tu madre pueda no tener intenciones maliciosas y, en cambio, actúa desde un lugar de inseguridad y preocupación por tu bienestar. Aunque su enfoque puede no ser el más saludable, es importante recordar que cada individuo tiene su propia historia y sus propias experiencias.
Es crucial mantener un equilibrio entre el respeto por el amor y la preocupación de tu madre, y tu propia necesidad de autonomía y crecimiento personal. Es tu vida y tienes la libertad y la responsabilidad de vivirla de acuerdo a tus propias elecciones y deseos.
Puede ser útil mantener una comunicación abierta con tu madre, expresándole tus sentimientos y necesidades de una manera comprensiva y respetuosa. Esto puede ayudar a construir puentes y fomentar una comprensión mutua. Además, buscar el apoyo de amigos, familiares o incluso un consejero puede ser beneficioso para ti mientras navegas por esta situación complicada.
Recuerda que tu bienestar y felicidad son importantes, y mereces tener la libertad de seguir tu propio camino y tomar decisiones que te permitan crecer y prosperar.
Como ser independiente sin tener que romper o dañar la relación con tus padres:
Ser una persona independiente sin lastimar la relación con tu madre en una situación como la que describes puede ser un desafío, pero es posible.
-
Comunicación asertiva: A pesar de las dificultades para comunicarte con tu madre, es esencial expresar tus pensamientos y sentimientos de manera asertiva y respetuosa. Trata de ser claro acerca de tus necesidades y deseos sin culpar o juzgar a tu madre.
-
Establece límites saludables: Define límites claros sobre lo que estás dispuesto a aceptar y lo que no. Esto puede incluir cuándo estás dispuesto a comprometerte y cuándo necesitas seguir tu propio camino.
-
Toma decisiones informadas: Asegúrate de tomar decisiones basadas en tus valores y metas personales. Considera cuidadosamente las implicaciones de tus elecciones y cómo pueden afectar a ti y a los demás.
-
Busca apoyo externo: Si no puedes hablar con tu madre o si la comunicación es demasiado difícil, busca apoyo fuera de la relación familiar. Amigos, terapeutas u otros seres queridos pueden proporcionar orientación y apoyo emocional.
-
Mantén el respeto: A pesar de las diferencias, intenta mantener el respeto por tu madre. Recuerda que todos somos seres humanos con imperfecciones y luchas personales.
-
Dale tiempo: Cambiar dinámicas familiares puede llevar tiempo. Es posible que tu madre necesite tiempo para adaptarse a tu crecimiento y evolución como individuo independiente.
-
Acepta que no puedes cambiar a tu madre: A veces, debemos aceptar que no podemos cambiar a las personas que nos rodean. En lugar de tratar de cambiar a tu madre, concéntrate en tu propio crecimiento y bienestar.
-
Enfócate en el autocuidado: Asegúrate de cuidar de ti mismo física, emocional y mentalmente. Esto te ayudará a mantener tu independencia y a manejar el estrés que pueda surgir de la relación.
Recuerda que cada situación familiar es única, y puede ser necesario adaptar estos consejos a tu situación particular. La clave es encontrar un equilibrio entre ser independiente y mantener una relación respetuosa con tu madre, incluso si eso significa establecer límites claros para proteger tu bienestar.
Deja un Comentario