Una de las razones más importantes por las cuales tengo muy mala relación con mi mamá es porque no me entiende y me da los peores consejos de la vida. Recuerdo cuando era adolescente le llegaba a pedir algunos consejos cuando me iba mal con mis novios mi madre me decía que siempre era mía la culpa, que yo elegía a los hombres incorrectos  que ella ya me lo había advertido que ella ya me había dicho que no se veían como buenas personas.. No siento que pueda entablar una buena comunicación con mi madre ya que siento que es muy ignorante y me culpa de mis malas decisiones. 

Becky responde

Entiendo que estés experimentando dificultades en tu relación con tu madre debido a la falta de entendimiento y los consejos que percibes como negativos. Es importante recordar que cada persona tiene su propia perspectiva y forma de comunicarse, y a veces puede resultar difícil encontrar puntos en común.

 

Pero es importante aclarar que no porque no te guste o no te sirva el consejo que te da tu madre la haga una persona ignorante o que sus consejos no sean adecuados. Muchas veces estos consejos “malos” son preocupaciones y dolores que no se han podido expresar en una forma legítima.

 

Entiendo que echar culpas no es muy eficiente pero si pudieras ver en el tono de tu madre que ella está realmente enojada con las elecciones porque siente que el sufrimiento tan grande que tienes pudiera haber sido evitado si se hubieran podido comunicar y ella te hubiera explicado que es lo que veía mal en los chicos con los que sales sin tener que llegar a la culpa y al reproche.

 

Creo que es posible mejorar la comunicación y fortalecer la relación madre-hija sin necesidad de destruirla.

 

Aquí tienes algunos consejos que podrían ayudarte a abordar esta situación de manera positiva:

 

1. Practica la empatía: Intenta comprender los motivos detrás de los consejos de tu madre y cómo su experiencia de vida puede influir en su perspectiva. Reconocer sus preocupaciones puede abrir espacio para una comunicación más comprensiva.

 

2. Comunica tus sentimientos: Exprésale a tu madre cómo te hacen sentir sus consejos y cómo te gustaría que te apoyara de una manera que te resulte más útil. La comunicación abierta y honesta puede ayudar a clarificar malentendidos y fortalecer el vínculo entre ustedes.

 

3. Establece límites saludables: Si sientes que ciertos temas o consejos son contraproducentes para ti, establece límites claros pero respetuosos. Explícale a tu madre cuáles son tus necesidades y cómo puede apoyarte de manera más efectiva.

 

4. Busca apoyo externo si es necesario: Si la comunicación directa con tu madre sigue siendo difícil, considera buscar la orientación de un terapeuta familiar o de un consejero profesional. Ellos pueden proporcionar estrategias y herramientas para mejorar la dinámica de tu relación.

 

5. Cultiva momentos positivos juntas: Dedica tiempo a compartir actividades que ambas disfruten y que fortalezcan su relación. Estos momentos pueden ayudar a construir un puente de conexión y complicidad entre tú y tu madre.

 

Recuerda que todas las relaciones tienen sus desafíos, pero con paciencia, comprensión y esfuerzo mutuo, es posible superar las dificultades y fortalecer el vínculo entre madre e hija.