Tengo más de 8 meses que terminé con mi novia. Los dos somos personas adultas, divorciados y con hijos.  Ella es una mujer muy liberal. Le gustaban las emociones fuertes aun cuando eso implicaba poner nuestra seguridad en riesgo. Es muy divertida, muy atractiva y espontánea. A pesar de que siempre supe que era muy diferente a mi me emocionaba y me gustaba mucho estar con ella. Al final tristemente me maltrato, me humilló y no respetó mi forma de ser, más tradicional, trabajador y más estructurado. Terminamos porque era mayor mi sufrir que los tiempos divertidos. A pesar de que sé que fue una buena decisión terminar con esa relación, estoy sufriendo y la extraño mucho.

Becky responde

 

Toda pérdida duele aun cuando son buenas perdidas. Entiendo que te sientas solo y que extrañes las emociones fuertes y las aventuras que dices que pasaron juntos. Pero  por lo que se escucha, la relación que describes es una relación de adolescentes, que no tienen responsabilidades y que prefieren vivir el momento.

Eres un hombre divorciado y tienes hijos, no se si una relación/aventura es lo que en estos momentos sea lo más prudente para tu situación. De principio suena muy excitante y divertido pero no se que tanto puede ser una relación estable a la que puedas incluir eventualmente a tus hijos.

 

Las aventuras son divertidas pasajeras y para que no desgasten a la relación tienen que estar sostenidas de un poco de conciencia y responsabilidad de otra forma se convierten en escapes vacíos y con el tiempo hasta peligrosos.

 

Por otro lado, no todas las relaciones formales y sólidas tienen que ser aburridas y monótonas. Creo que no es bueno caer en ninguna de los dos extremos.

 

Hay veces que es conveniente vivir el duelo de una buena pérdida en lugar de exponerse al maltrato y a la idea de que hay que divertirse sin tomar en cuenta los sentimientos, ni respetar los límites de otra persona.

 

¿Cómo superar el dolor del duelo de una relación de pareja?

Cada persona tiene su tiempo para sanar el dolor, toma tu tiempo y respeta tus sentimientos.

1. Date permiso para sentir tus emociones. Es muy normal sentir tristeza, enojo y hasta sentir un alivio después de una ruptura. Respeta tus sentimientos y no trates de estar bien o quedar bien con otras personas. Date tiempo para sanar.

2. Cuidate. Ahora es tiempo de ver por ti tanto física, mental como emocionalmente. Trata de dormir lo suficiente sin quedarte tirado en el sillón todo el día. Sal hacer ejercicio y sal a caminar al aire libre si es posible. Come sano, no busques comida chatarra para aliviar el dolor, ni te refugies en el alcohol.

3. Apoyate con las personas que te quieren y te entienden. Recurre a los familiares, tus amigos, colegas o consejeros espirituales, terapistas etc. busca personas que te puedan escuchar y ayudar a que no te sientas solo.

4. Date tiempo. Sanar no es de un día al otro. Ten paciencia y no te apresures a los tiempos que tu cuerpo y tu corazón te piden. Un duelo que se respeta, es un duelo que se supera.

5. No busques otra relación para olvidar o curar tu dolor.

6. Aprende la lección que la relación te quiere enseñar. Reconoce lo que aprendiste de ti y de ella. Acepta los errores y definitivamente aprecia los buenos momentos que tuviste. Esos serán parte de las memorias que te harán fuerte para salir a buscar una mejor relación.