Lo que envidias de mi es algo que quieres o deseas tener y no lo tienes.
Una clienta me dijo: Yo no se cual fue la razon que mi hermana me tiene tanta envidia. Desde jovenes nos hemos peleado, y me siento que todo lo que yo tengo, ella lo quiere para ella.
Este sentimiento que tienes hacia tu hermana, es un sentimiento normal, que mucha gente también lo siente, sin embargo no todo el mundo se atreve a hablar de sus sentimientos.
Cuando uno entiende la esencia y el concepto de lo que es la envidia, se hace más fácil poder manejar el sentimiento sin sentir resentimiento, enojo o culpa.
La envidia es un sentimiento natural y común que se puede llegar a sentir en cualquier momento, es un sentimiento de deseo intenso hacia algo que otro posee. Por lo tanto, el sentir envidia es un problema, porque se enfoca en lo que tienen los demás.
Sin embargo es un sentir natural que cuando se le reconoce se puede diluir y entonces deja de ser un tema tan serio e incómodo como parecería. Por este motivo es necesario poder entender los motivos que despierta este sentimiento para controlar su intensidad y desviar la frecuencia con la que este sentimiento ocurre.
La envidia se define como una emoción negativa que incita querer hacer daño o desear lo que otros tienen. Es difícil aceptar cuando uno siente envidia ya que su connotación implica que de alguna manera que uno tenga que aceptar y controlar el impulso de querer dañar a alguien a un ser querido.
Sentir envidia lastima las relaciones y destruye los amores verdaderos.
La envidia es una emoción difícil de expresar porque nos hace ver como personas no gratas sobre todo hacia las personas que envidiamos, de hecho se hace aún más difícil cuando se tiene que reconocer a uno mismo el sentimiento real pero obscuro que se siente.
La envidia siempre tiene una connotación complicada porque aunque algunas personas aluden a sentir “envidia de la buena” justificándola diciendo que sienten admiración o deseos constructivos de ser igual que la otra persona. Pero en sí, este sentimiento contiene un tono de desprecio, enojo, celos, narcisista y competitividad.
¿Cómo surge este sentimiento?
La envidia se considera una emoción social porque surge a raíz de la comparación con el otro, la comparación; e implica una evaluación negativa hacia nosotros mismos. Los sentimientos que se desencadenan cuando la envidia corroe el alma causa que uno se valore como algo negativo, por lo que las creencias que se nutren sobre uno mismo serán: Yo no soy valioso, no soy suficiente, soy inadecuado, etc. y por lo tanto me siento culpable, mentiroso y hasta se cubre la vergüenza que se llega a sentir hacia uno mismo.
La persona envidiosa desboca sus sentimientos sin contenerlos, sufre, se amarga y tristemente vive en un mundo gris aislado de felicidad y pierde la alegría por vivir. Yo no sé cuál fue la razón por la cual la persona comenzó a sentir envidia, sin embargo, es importante aprender a sanar este deseo que hace sentir que uno tiene un vacío insaciable, el cual no resiste que otros tengan lo que uno no tiene este sentir solamente envenena al alma.
La envidia no son celos. Aunque estos son sentimientos que se parecen su esencia es muy distinta.
Mientras la envidia se enfoca en lo que el otro tiene y uno carece. Los celos están fundados en el miedo de perder lo que uno tiene. Los celos son hacia lo que cada uno siente, valora y quiere cuidar. La envidia solo se refiere a lo que tienen los demás y uno no tiene.
Yo no sé cuál fue la razón por la cual hay gente envidiosa o celosa, pero cada uno se tiene que hacer responsable por los sentimientos y las acciones que hace y tiene. Hablar y reconocer los celos y la envidia de los demás solo ciega la realidad y evita que uno confronte sus propio sentir. Tanto la envidia como los celos lastiman la calidad de vida que se puede llegar a tener por lo que es importante aprender a reconocerlos y sobre todo poderlos canalizar de una forma positiva.
Los pensamientos positivos, los mensajes de amor, y las reflexiones de vida son herramientas muy útiles para poder enfocar la atención en aspectos nutritivos y positivos, con el fin de manejar la envidia y poderla superar.
A veces, la envidia puede volverse tremendamente tóxica tanto para uno mismo como para los demás. Si se trata de personas narcisistas que necesitan constantemente sentirse especiales, grandes, exitosos, poderosos, brillantes, admiradas, y cuando esto no se cumple pueden sentir una envidia destructiva hacia los demás por lo que tratarán de quitarle al otro lo que tiene o de devaluarle para poder mantener su imagen exaltada frente al otro; pues les es complicado asumir que otro pueda tener cosas que ellos no tienen, y sentir que otro puede ser mejor que ellos.
Problemas causados por la envidia
- Falta de comprensión hacia todo lo que le rodea.
- Deteriora todas las relaciones involucradas.
- Aumento de sentimientos negativos como el odio, rencor, enojo y el sentirse de menos y con mucha inseguridad.
- Intoxica al alma y llena a la persona de angustia y soledad.
- Evita sentir gratitud y alegría, condiciones necesarias para ser feliz y vivir en plenitud.
- Se pierde la capacidad para disfrutar el presente.
- Ciega la realidad e impide valorar el esfuerzo y trabajo que hacen los otros para poder tener lo que tienen.
La envidia no es un sentimiento constructivo.
Le quita brillo a la vida y promueve el menosprecio y la posibilidad de ser mejor. Las personas envidiosas no progresan mucho y lo peor es que por concentrarse en lo que tienen los otros, no permite enfocarse en las posibilidades propias para triunfar y valorar lo que sí se tiene.
No porque la envidia es un sentimiento natural quiere decir que uno tiene que dejar que este sentir se apodere de uno.
Hay que encontrar la forma de reconocer cuando uno está sintiendo envidia o celos y ver la manera de redirigirlos y transformarlos para tener una mejor calidad de vida.
Técnicas para poder vencer la envidia
- Conoce y platica con la persona que se le tiene envidia. Puedes sorprenderte de su gusto por compartir lo que sabe y sus experiencias así también se puede respetar sus triunfos y valorar sus aciertos.
- Dirige tu atención pensando en positivo. Buscar lo bueno, lo constructivo y lo que puedes aprender para que tu puedas conseguir lo que deseas.
- Aprende a disfrutar la buena fortuna de los otros. Cuando aprecias y fluyes con todo lo que tienen los demás, el universo te sonríe y te permite ver oportunidades que pensabas que nunca llegarían.
- Edita tus pensamientos para encontrar una visión más constructiva. No critiques, juzgues o hables mal de gente que tiene lo que te gustaría tener.
Utiliza el sentimiento que produce la envidia para ser mejor, para progresar y para fluir con la vida. No le quites el brillo a las personas que te rodean. Se feliz por lo que tienes y descubrirás un mundo noble lleno de posibilidades y oportunidades.
El mejor antídoto que hay para contrarrestar este sentimiento tan dañino, es actuar con bondad y cariño.
Si realmente eres más afortunada, tienes más suerte y te va mejor, es decir si tú tienes más que tu hermana y de alguna manera la puedes ayudar y/o le puedes compartir de tu buena fortuna, pues que mejor ser humano te vas a convertir y desde luego te vas a sentir mejor contigo y quizá tu hermana aprecie tus atenciones y tu sensibilidad.
¡Se tú la mejor persona!
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Linda
Tengo una situación muy conflictiva con mi hermana horrible tanto que sus hijos que críe actúan igual que ella , insultos golpes y demás , son tres contra mi , aparte me han alejado de mis padres por sus chismes , he tomado la desicion de alejarme de mis padres por lo mismo