La suegra perfecta es una mujer que apoya las decisiones de su nuera.
Visita solo cuando la invitan, solo da sus comentarios si se lo permiten y siempre está disponible para cuidar a los nietos. Tiene la bolsa abierta, dispuesta a cooperar y regalar a manos llenas.
La suegra perfecta tiene la mesa servida hasta cuando no espera a nadie en la casa. Se viste de color beige, un color tenue para no llamar la atención y no competir con su nuera ya que ella siempre tiene que lucir mejor. Debe tener una buena disposición y no compartir sus preocupaciones
¿Acaso existirá una suegra con todas estas cualidades?
Es más importante la relación que se tiene y se hace que el tener la razón por lo que se dice.
Hay muchas suegras optan por interferir en la relación de pareja de sus hijos, y sin pensar, causan conflictos y hasta rompen amores verdaderos.
Muchas veces lo hacen pensando que tienen una buena intención porque insisten que su consejo y experiencia puede mejorar la calidad de vida del nuevo matrimonio.
Quizás critican el modo en que la pareja está educando a sus niños o la forma como cocina su nuera. La cuestión es que sus comentarios no tienen mensajes positivos y su forma de hablar no contiene frases bonitas.
La verdad es que no importa el motivo por el cual se crítica, ni siquiera importa quien tiene la razón. Las críticas lastiman y deterioran todas las relaciones, ocasionan distancia y mentiras que al final… terminan llevándose de paso a sus hijos y hasta en el peor de los casos destruyen a la familia.
Por otro lado, hay veces que la nuera también puede incluir y afectar la relación entre ella y su suegra. Su poca tolerancia y convencida que ella tiene la razón, crea conflicto colocándolo en una disyuntiva a su esposo, su madre (suegra) y ella.
Si bien es cierto que estas relaciones son difíciles, no son imposibles ni fantasiosas.
Lo que se debe en estos casos es que lo importante es preservar la relación sin tratar de predominar con la razón propia. La lucha de poder por encontrar quién está en lo cierto no solamente no debería de existir, tampoco debería de ser un tema dentro de la relación. No se cual es la razón que las personas se enfocan tanto en tener la razón y no se dan cuenta que por tener tanta desesperación en mostrar su punto que terminan destruyendo la relación.
Lo más importante siempre debe ser mantener una buena relación, esto es por el bien de todos. Poder decir “te quiero mucho” cuantas veces sea necesario y saber que la vida es bella cuando todos se respetan y se aprenden a entender.
Si bien, tanto la suegra como la nuera perfecta pareciera ser una fantasía de telenovela, no creo que ¿será una fantasía la posibilidad de tener una buena relación y armonía familiar?
Valdría mucho la pena dejar los guantes de box y usar guantes de cocina para hornear una vida feliz y tener un feliz matrimonio.
LA RECETA
La suegra perfecta
INGREDIENTES
- 1 Frasco de Compromiso
- 1 Cucharada de Armonía
- 2 Barritas de Respeto
- 1 litro de Paciencia
RECOMENDACIÓN DEL CHEF
Ser suegra es una relación delicada que se debe de cuidar con inteligencia y prudencia. No se trata de sustituir el lugar de una madre, ni ser la juez que critica cómo educan a los nietos. Ser suegra es ser una mujer que está interesada en el bienestar de sus hijos, nietos y la familia en general.
MODO DE PREPARACIÓN
A pesar de que la vida no tiene una medida pre-escrita, hay veces que debemos comprometernos con el corazón lleno, sin reservas, y esta receta es el caso ideal; no se puede tener una relación a medias con las personas significativas en nuestra vida. Lo que verdaderamente enriquece cualquier trato por mas difícil que esta sea, será entender, respetar y valorar a las personas que componen la relación, cuidándolas y manteniéndolas a una temperatura ambiente, sin dejar que se enfríen o se calienten demasiado. Es altamente recomendable, tener algo que ofrecer siempre, una sonrisa, una caricia o en casos un pequeño dulce también, esto sazonara la relación con aromas apetitosos, invitando a las personas a siempre querer compartir su vida con usted. Evite buscar razones que solo conduzcan a luchas de poder, dedíquese a buscar motivos para entender a la otra persona, agréguele un poco de positivismo y tome tiempo para agradecer que tiene la oportunidad de convivir con esas personas que mas quiere. La verdad es que la relación vale mucho mas que la razón.
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