Cuando éramos pequeños mi hermano y yo eramos mejores amigos, ahora que somos adultos, creo que no puedo tener una relación sana y armoniosa con mi hermano. Tenemos vidas distintas y cada uno es feliz con lo que tiene pero siento que mi hermano me critica de todo lo que hago y cuando puede, se hace amigo de mis amigos hasta los invita a su casa sin que yo esté, con mi madre se trata de hacer el santo y siempre es él el que dice que ayuda mas y hace todo por mi mama. Es imposible hacer algo sin que él opine, critique o corrija. Estoy molesto con la situación ya que no se como y por que cambio tanto él conmigo.

Becky responde

La relación de amor-odio, rivalidad- competencia con los hermanos no es una novedad en este mundo. Esta es una relación compleja que con los años cambia. Ya que como mencionas cuando eran pequeños eran cómplices y ahora son competidores.

 

Ambos son responsables de esta relación, y aunque uno se haga pasar como víctima, posiblemente ambos se provoquen y promuevan el mal sentimiento.

 

Es muy recomendable que los hermanos aprendieran a canalizar sus sentimientos de amor-odio y rivalidad hacia formas más saludables de competencia y cooperación, para poder establecer relaciones más armoniosas y duraderas en el futuro.

 

Entiendo que ahora te sientes molesto y asilado de tu hermano y hasta sientes que te odia que que no tienen nada en común pero creo que existe un poco la rivalidad generada  por el amor y la atención que los dos sienten hacia tu madre.

 

Este sentimiento hace que la relación entre ustedes se atropelle y se haga más tensa la comunicación.

 

Lo mas sano seria que reconocerán los dos que a pesar de las diferencias y de los sentimientos que cada uno tenga hacia el otro, son FAMILIA, tiene la misma sangre y juntos pueden construir una ambiente más sano y cordial no solo por hacer sentir mejor a tu hermano, sino para que tu tambien te sientas mas comodo y seguro.

 

Los hermanos no solo son competidores, sino también aliados en el camino de la vida. Al reconocer y apreciar las fortalezas y talentos de cada uno, se puede fomentar la colaboración y el apoyo mutuo para lograr objetivos comunes.

 

Es  importante cultivar el amor y el respeto entre los hermanos, reconociendo que cada uno tiene un propósito único en el mundo y que la rivalidad puede obstaculizar el desarrollo de su potencial individual.Hay que  encontrar la forma de convivir en armonía, buscando la reconciliación y evitando dañar al otro con palabras o acciones perjudiciales.

 

Encontrar armonía entre hermanos que no se llevan bien y experimentan rivalidad y envidia puede ser un desafío, pero existen algunas estrategias que pueden ayudar a mejorar la relación.

 

Estrategias para mejorar la relación de hermanos:

 

1. Comunicación abierta y honesta: Fomentar un espacio seguro para expresar sentimientos y preocupaciones. Escuchar activamente a cada hermano y tratar de comprender su perspectiva. Evitar la crítica destructiva y buscar soluciones constructivas juntos.

 

2. Cultivar la empatía y el respeto mutuo: Intentar ponerse en el lugar del otro y comprender sus motivaciones y desafíos. Reconocer las fortalezas y logros de cada hermano en lugar de compararse constantemente. Tratar a los demás con respeto y cortesía, promoviendo un ambiente de apoyo mutuo.

 

3. Enfoque en intereses comunes: Identificar áreas de interés compartidas y buscar actividades en las que puedan participar juntos. Esto puede ayudar a construir conexiones positivas y desarrollar un sentido de camaradería.

 

4. Fomentar la reconciliación y el perdón: Reconocer que todos cometemos errores y que es importante perdonar y dejar el pasado atrás. Trabajar en la resolución de conflictos de manera constructiva y encontrar soluciones que satisfagan a ambas partes.

 

5. Buscar ayuda externa si es necesario: En casos más difíciles, puede ser útil buscar la ayuda de un consejero familiar, terapeuta o mediador para facilitar la comunicación y el proceso de reconciliación.

 

Es importante recordar que el cambio lleva tiempo y esfuerzo, y que cada relación es única. Sin embargo, al comprometerse con el proceso y mantener una actitud abierta y positiva, es posible encontrar la armonía y construir una relación más saludable y enriquecedora entre hermanos.