La historia que repites acerca de ti, te convierte en la persona que eres. Ten cuidado con lo que cuentas de ti, eventualmente te lo vas a creer.
Todos tenemos una historia que nos define y nos contiene, una historia que nos marca y que nos describe. Contar historias es una forma de compartir nuestras ideas, sentimientos, fantasías y expectativas.
La narrativa que repetimos es la historia que perpetuamos en la mente. Algunas historias son nobles y motivan a actuar en forma constructiva, plasman esperanza y compasión, por lo que ayudan a que las personas sean más optimistas y mejor adaptadas ante las adversidades o cambios inesperados; sin embargo hay otras historias que tienen un tono nostálgico cargados de dolor y resentimiento por lo que limitan el pensamiento, amargan el carácter y hacen imposible encontrar buenas razones para vivir en paz y armonía.
La identidad propia, se basa en la historia que cada uno elige repetirse diariamente. Yo soy una persona… No puedo hacer esto porque… Vengo de una familia que no tolera….
Esa narrativa vincula a la persona con su pasado, se convierte en una guía en el presente e impacta las consecuencias personales para que se puedan hacer responsables en el futuro.
Contar una historia noble, positiva y creativa acerca de uno mismo mejora la salud mental y ayuda la relación que se tiene con uno mismo y con los demás.
Las historias personales fomentan:
Un propósito más claro de la vida. Quien soy.
Acompañan a la persona en su jornada. A donde voy.
Encuentran una conexión humana y marcan la dirección a seguir. Cómo me relaciono con otros.
Hacen que la persona sea más empática con sus sentimientos y mejora la capacidad para retener detalles y más información. Que me permite, sentir decir y recordar.
Las historias compasivas fomentan la conexión y dan un sentido más significativo a todo lo que sucede alrededor. Incrementa las emociones positivas.
Las historias pueden llegar a controlar el humor y pueden mejorar la imagen que se tiene de uno mismo. Como veo al mundo y que le puedo aportar.
Aumentan la posibilidad de escuchar y nutren la imaginación.
Las historias pueden ser los cimientos para construir el éxito personal.
Las historias se pueden editar o transformar para cambiar y tener una mejor calidad de vida.
Cambiar tu historia cuando sientes angustia, depresión o nostalgia puede cambiar tu opinión, tu actitud y mejora tu salud mental. El cambio puede ser insignificante, pero el impacto es grandísimo.
Para lograr cualquier tipo de cambio sustancial lo primero que uno tiene que hacer es cambiar la historia que se repite. Redirigir el foco de atención, la intención y la forma de percibir las ideas que componen las historias que se tiene.
Las historias que se componen de ideas claras y concretas.
Estas historias ocupan lugar en la mente, son conceptos abstractos, que tienen un espacio en el cerebro, aunque estas no se puedan ver o tocar. Para cambiar la historia es necesario soltar las historias que ya no funcionan o que limitan y contarse ideas positivas y más constructivas.
Repensar y liberarse de las ideas que no funcionan es vivir en el presente y vivir con una mente abierta dispuesta a adaptarse a un mundo nuevo.
La receta
Cambia tu historia
Ingredientes
- Reconocimiento – escuchar y aceptar las historias que se repite
- Determinación – fortaleza para elegir las ideas positivas que aporten y enriquezcan
- Valor – poder para cambiar o editar lo que no sirve o lastima
- Compasión – capacidad para juzgar favorablemente y con cariño su historia
- Curiosidad– deseo para expandir las ideas que motivan a ser mejor
Afirmación Positiva para cambiar tu historia.
Yo soy la historia que repito. Tengo el valor de repensar y cambiar mis propias ideas cuando estas no me sirven o me limitan. Escucho con atención mis historias. Trato de buscar ideas positivas, creativas y cultivo la empatía cuando platico. Compartir mis historias me permite conectarme con otras personas y me ayuda a que me puedan conocer de una forma más real. Mis historias revelan mis sueños y mis deseos de ser mejor. Cambio las historias negativas que me limitan y me esclavizan.
Como se cambian las historias personales
Cambiar la historia personal mejora la salud mental y la imagen personal.Poder repensar y confrontarse a uno mismo es una señal de integridad intelectual; admitir que se puede renovar y cambiar sus ideas encuentra mayores posibilidades de vivir con mejor calidad de vida.
Todas las historias son valiosas cuando motivan y dirigen a tomar buenas decisiones. Cuando las ideas paralizan o envenenan el alma es momento de refutarlas, cambiarlas y hasta de liberarse de ellas.
Requiere una actitud con mente abierta para aprender a cambiar las historias que no sirven. Las historias revelan las diversas posibilidades que cada persona tiene para relacionarse, entre más abierta y flexible sea la persona mejores serán las historias que se repitan.
Tu eres la historia que te repites, si quieres cambiar tu suerte, cambia tu historia. *Prohibida su reproducción total o parcial sin el permiso escrito del editor y sin citar la fuente.
Leave a Reply