Por muchos años sufrí de mucho dolor ya que mis hijos me rechazaban y eran muy groseros conmigo. Hace unos meses mi hija me confesó que su papá le decía que yo era una mala madre y que no los quería. Que solo veo por mi porque yo trabajo y no tenía tanto tiempo para pasar con ellos. Yo trabajo, pago las cuentas de la casa y siempre estoy disponible para ellos aun cuando ellos no se me quieren acercar.El no da un centavo para los chicos. Por casualidades de la vida escuche una llamada de mi Ex con mi hijo y por más de 30 minutos el le dijo pura porqueria y mentiras acerca de mí, me dolió mucho que mi hijo tenga que escuchar tanta agresión verbal, que triste que el señor tenga que hablar mal de mi para causar lastima y que mi hijo pase más tiempo con el. ¿Qué me recomiendas hacer?

Becky responde

Que injusto es que los hijos tengan que pagar los resentimientos, envidias y celos de sus padres. Entiendo que tu no tienes la culpa de que este señor se comporte como un adolecente y te quiera lastimar por medio de la relación que tienes con tus hijos. Pero creo que tienes la responsabilidad y el compromiso ante tus hijos de parar esta situación que está desgastando la relación con tus hijos. Por el bienestar de todos.

Los hijos no deben de ser utilizados como mensajeros o como pelota la cual bota de un lado al otro dependiendo el humor y los problemas de los adultos. Bastante tienen con tener que manejar una familia fracturada y vivir en dos casas.

No se vale utilizar a los hijos para proyectar y ventilar los sentimientos de los adultos responsables.

Creo que sería conveniente que tengas una plática clara y sin discusiones con tu ex y le plantees el hecho que a pesar de que él se siente mejor cuando te hace de menos frente a tus hijos al final del día solo está lastimando a los muchachos.

No hagas que la discusión gire en torno a cómo él te hace sentir y como te lastima ya que eso es exactamente lo que busca y lo que finalmente espera. Por lo que te recomiendo que le expongan con claridad que el tema a tratar es el bienestar de sus hijos y el como eventualmente su relación basada en mentiras, amenazas y manipulaciones se le puede voltear en su contra. Ya que todo lo que uno da eventualmente le llega de regreso.

Cómo hablar con tu Ex sin entrar en discusiones frustrantes e inconclusas.

1. No hagas que su problema sea tu problema. Es decir aclara que lo que él sienta lo respetas siempre y cuando no lastime ni utilice a los hijos como medio para manipular o hablar mal de ti.
2. Si tienen temas pendientes aclaren los directamente sin utilizar intermediarios.
3. No estás discutiendo lo que dice ya que eso es entrar en una discusión que fácilmente te la puede negar, enfócate en a quien se lo dice, y el dolor que causa.
4. Hay que poner límites claros y establecer que lo único que buscan es el bienestar y la tranquilidad de los hijos.
5. Mantener un tono cordial y calmado. No hablar con gritos, amenazas ni humillaciones. Hablar con un tono respetuoso y amable. Si tu ex esposo siente que lo estás atacando o acusando, es más probable que se ponga a la defensiva.
6. Sé específica: Cuando hables con tu ex esposo, asegúrate de ser clara sobre lo que quieres discutir. En lugar de decir “Hablemos de que dices”, intenta decir “Quiero aclarar cómo funcionan los horarios para la próxima semana de vacaciones”.
7. Escucha antes de seguir la discusión: No interrumpas y no lo contradigas de inmediato. Dale la oportunidad de expresar sus puntos de vista y preocupaciones el poder escuchar abre la posibilidad para poder entender qué es lo que en verdad se está discutiendo.
8. Busca soluciones: En lugar de enfocarte en los problemas, busca soluciones. Si no puedes llegar a un acuerdo, considera la posibilidad de buscar la ayuda de un mediador o un consejero y escriban los acuerdos para que después no hayan malentendidos.
9. Mantén la comunicación abierta: Mantener una comunicación clara y regular puede ayudar a evitar malentendidos y problemas en el futuro.

Recuerda que hablar con tu ex esposo no siempre será fácil, sobre todo si existe algún tipo de resentimientos, pero si es posible aprender a tener conversaciones efectivas y respetuosas, y lo más importante que tienen ambos que recordar que el bienestar de los hijos NO ES NEGOCIABLE.