Me casé a los 19 años con un colombiano. Ya tengo 20 y quiero divorciarme. Tengo una niña de un año y medio. No tengo plata para el abogado.
Antes de pensar en el divorcio, es muy importante que sepas que ya eres mamá y que tienes una pequeña que depende de su madre y tiene el derecho de tener a su padre también. Así que hay que pensar en una forma responsable y sensata.
El matrimonio es un compromiso serio. Es una relación compleja y no siempre es de color de rosa, claro que no por eso uno se tiene que aguantar y vivir en un infierno tampoco.
Tienes que analizar por que te quieres divorciar. ¿Tu esposo te maltrata o te lastima? ¿No te sientes segura porque se emborracha y no cumple? ¿Te abandona? ¿Es infiel? ¿no trabaja y hace que tu salgas a trabajar? ¿molesta a tu hija? O simplemente ¿ya no lo quieres y no eres feliz porque esperabas que el matrimonio fuera diferente?
Es importante que sepas que: EL DIVORCIO TERMINA CON EL COMPROMISO MORAL, LA INTIMIDAD Y EL TECHO COMÚN. NO SOLUCIONA LOS PROBLEMAS PERSONALES QUE SE IGNORARON DURANTE EL MATRIMONIO. Osea si tienes alguna cuestión personal trata de solucionarla y de vivir en paz contigo.
Ya tienes una hija, ahora tienes que pensar por el bien y la seguridad de las dos. Acuérdate que el divorcio no es una solución fácil. Es una pérdida, un proceso difícil y un reajuste a la vida personal. Además de todas las implicaciones legales, económicas y sociales, también es la puerta pesada que atrae nuevos problemas y más serios.
Pero… si después de todo sientes que el divorcio es tu mejor solución y no tienes plata para pagarlo, busca en la corte del país donde vivas algún abogado que trabaje para el condado y ellos te pueden asistir.
Si hubiera abuso, maltrato infidelidad o abandono de hogar, entonces puedes levantar una demanda en la corte familiar. Este procedimiento es totalmente gratuito y así te puedes proteger y cuidar a tu hija también.
Deja un Comentario