Nunca me había molestado cuando mi familia tomaba decisiones ya que siempre estaba incluida en los planes. Hace poco comenzaron algunos problemas en la familia y mis dos hermanos mayores decidieron que ellos solucionarían todo. Nunca me comunicaron lo que hacían o las decisiones que tomaron. La poca comunicación que me quedaba cambiaron las direcciones electrónicas y hoy día me siento una extraña alejada de todo y no siento que pertenezco a nada de mi familia. Cuando les pregunto dicen que yo tengo que acercarme a preguntar y tratar de involucrarme así. Pero si pregunto no me responden, si me acerco me ignoran y si opino me dicen que no tengo suficiente información. Estoy frustrada y además tengo el corazón roto. 

Becky responde

Lamento mucho escuchar sobre la difícil situación que estás enfrentando con tus hermanos mayores y cómo te has sentido excluida y alejada de tu familia debido a la falta de comunicación y transparencia en las decisiones que están tomando. Es completamente comprensible que te sientas frustrada y herida por esta situación, especialmente cuando siempre has sido parte activa de la familia y de repente te encuentras en esta situación de desapego.

 

Es importante que sepas que tus sentimientos son válidos y que no estás sola en esta situación. Es natural querer sentirse incluido y valorado en la familia, y es entendible que te sientas afectada cuando te excluyen de las decisiones importantes.

 

En cuanto a la situación con tus hermanos, te sugiero que intentes abordar el tema con ellos de manera calmada y respetuosa, expresando tus sentimientos y preocupaciones de manera clara y honesta. Comunica cómo te has sentido excluida y cómo te ha afectado esta falta de comunicación. Es posible que no estén conscientes del impacto que sus acciones están teniendo en ti, y abrir un diálogo honesto podría ayudar a aclarar las cosas y encontrar una solución juntos.

 

Por otro lado, es importante que también busques apoyo fuera de la familia para manejar tus emociones y encontrar formas saludables de lidiar con la situación. Hablar con un amigo de confianza, un consejero o un terapeuta puede ser útil para procesar tus sentimientos y recibir orientación sobre cómo establecer límites saludables y cuidar tu bienestar emocional en esta situación complicada.

 

Recuerda que mereces ser tratada con respeto y consideración en tu familia, y no tienes que conformarte con sentirte excluida o ignorada. Confía en ti misma y en tu capacidad para encontrar una solución que te permita sentirte valorada y conectada nuevamente con tu familia.

 

Consejos para dejar de sufrir por el maltrato de tus hermanos:

 

1. Establece límites claros y comunica tus necesidades de manera asertiva.

2. Prioriza tu bienestar emocional y busca apoyo externo si es necesario.

3. Practica el autocuidado y dedica tiempo a actividades que te hagan sentir bien.

4. Evita tomar personalmente el comportamiento de tus hermanos y recuerda que sus acciones son un reflejo de ellos mismos, no de tu valía como persona.

5. Considera la posibilidad de buscar terapia o asesoramiento para desarrollar estrategias de afrontamiento saludables y mejorar tu relación contigo misma y con tu familia.