No me siento querida, ni tengo ganas de hacer nada porque no creo que a nadie le interese. Siento que la gente solo me pide favores y cuando ya no me necesitan me ignoran. Me dicen que me vaya. Me choca mi vida. No entiendo por qué nací.

Creo que todos en algún momento de nuestra vida hemos llegado a ese lugar negro, obscuro y lejano donde te encuentras hoy. Es muy difícil decirte que esto es pasajero, que pronto vas a ver la luz y demás porque ahora no estás para escuchar sermones ni palabras que te endulcen el alma. Entiendo que la vida de hoy es difícil y no hay mucho de donde agarrarse.

Son épocas que llegan y se van, dejando momentos de reflexión para tener pláticas privadas contigo. Eres tu la única persona que tiene que encontrar razones que le den fuerza para levantarte, aun cuando tu corazón esté triste, lastimado y muy cansado.

No hay palabras, ni poder humano que te puedan ayudar si tu no lo permites y para eso debes de reconocer que eres una persona valiosa y que tu vida si tiene un propósito.

Te recomiendo que escribas en una hoja las razones que tienes para agradecer, es decir, tu vida, tu salud, tu familia, aunque ahora no te sientas valorada. Y una buena idea es tratar de ayudar en algún centro que necesitan quien les pueda ayudar, ya sea con perros, o cualquier tipo de animales, o entregando comidas o paquetes. Hay mucha gente que si te va a valorar tu ayuda y les vas a hacer la diferencia en su vida.

Poco a poco saldrás de ese lugar triste que estas, y recuerda que, aunque el dolor por que no te quiere la gente como tu quisieras es inevitable, el sufrimiento es absolutamente opcional. Tu eliges sufrir por gusto.